El cambio de hora. Groucho.

Sus orígenes en España. En nuestro país el primer cambio se hizo el 15 de abril de 1918, aunque se dejó de hacer entre 1920 y 1925 y de 1930 a 1936. Hasta el siglo XX, España regía el tiempo por el sol, de forma literal. La hora civil oficial hacía referencia al Meridiano de Madrid, pero cada provincia tenía una hora local diferente dependiendo de sus coordenadas. De esta forma, Galicia tenía una hora diferente a las Islas Baleares, ya que un gallego ve salir el Sol más de 50 minutos más tarde que un balear. El siglo XX trajo consigo la hora del Meridiano de Greenwich (GMT) o Tiempo Universal (TU) para España (GMT+ 1 en invierno y GMT+2 en verano) , pero no fue hasta el 15 de abril de 1918 cuando se introduce el concepto Daylight Saving Time (DST), llamado también horario de verano. Desde ese momento, en verano se ha adelantado una hora a los relojes españoles, con algunas excepciones e incidencias.
 El final de la Guerra Civil llegó una hora antes al bando republicano que al nacional, pues tenían diferentes horarios. Y es que durante la contienda, los relojes vivieron su caos particular dentro de la catástrofe que sufrió el país. El 2 de abril de 1938 la zona Republicana sumó una hora al GMT y 28 días más tarde, otra más. En la zona Nacional, sin embargo, sólo sumaron una hora el día 26 de marzo. El final de la guerra no conllevó una sincronización horaria. Así, la España republicana empezó el año con una hora de adelanto respecto a la hora del Meridiano de Greenwich.
 En 1940, Franco decidió el cambio de horario en España por su afinidad política con Alemania e Italia, decisión que también tomaron otros países afines.


Mito de la zanahoria.
Durante muchos años se ha tenido la certeza que comer muchas zanahorias era bueno para la vista. En muchas dietas incluían este vegetal con la convicción de que aquel que las consumiese a diario evitaría llevar gafas de mayor.
El mito de que las zanahorias son buenas para la vista se remonta a la Segunda Guerra Mundial, cuando las Fuerzas Aéreas Reales británicas (RAF) intentaban ocultar el hecho de haber desarrollado un sofisticado sistema de radar aéreo para derribar a los bombarderos alemanes. Se jactaban de que la gran agudeza visual de sus pilotos de combate por la noche se debía a la enorme cantidad de zanahorias que comían.

¿Es cierto que el epitafio de Groucho Marx dice "perdonen que no me levante"?

El presunto epitafio del más popular de los Hermanos Marx es una "leyenda urbana" que ha tenido un especial predicamento en nuestro país.

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